René Mejía, epítome de las candidaturas simpatizantes

La selección de candidatos a los puestos de elección popular es uno de los momentos más importantes en la vida interna del Partido Revolucionario Institucional (PRI), sino es que el más importante. De lo sucedido en el proceso interno, depende en gran medida el resultado de la jornada electoral, y es por ello por lo que el PRI se conduce siempre con una mística ideológica profundamente arraigada, que se puede resumir en el apotegma de Don Jesús Reyes Heroles “La política se trata de tiempo y circunstancia”.

De ahí, pues, que quienes resulten electos como candidatos del PRI serán quienes representen al Partido y, en última instancia, de ellos dependerá el triunfo o la derrota electoral. Por eso, se ha vuelto sumamente importante al interior del PRI que quien aspire a una candidatura tenga un compromiso público de apertura, diálogo e inclusión política.

A lo largo de los años, la evolución política y democrática al interior del partido ha establecido distintas realidades para la validación de ese compromiso público; hubo un tiempo histórico donde el compromiso se suscribía solamente demostrando lealtad al líder político en turno; también ocasiones en las que los años de militancia y trabajo partidista eran el reflejo de esa voluntad.

Hoy, el PRI se ha consolidado como un instituto político democrático, razón por la cual, en un ejercicio de autodeterminación y autoorganización, se esfuerza por elegir a quienes consideren que pueden contender y ganar en las elecciones; dando paso a las candidaturas de simpatizantes, ciudadanas y ciudadanos libres, que de manera voluntaria reconocen en el PRI la mejor opción para aportar a la justicia social, aun sin contar con una militancia vigente.

Las candidaturas simpatizantes son una de tantas medidas tomadas por el PRI para promover la participación del pueblo en la vida democrática y hacer posible el acceso de los ciudadanos al ejercicio del poder público.

El PRI, consciente de su papel preponderante en la consolidación del Estado democrático y, por ende, en el ejercicio de derechos fundamentales, se constituye a sí mismo como un medio para garantizar que cualquier ciudadano mexicano pueda ejercer el derecho político-electoral de ser votado; y por supuesto, al tiempo, hacerse con el poder.

Las reglas que el PRI ha implementado en su normativa interna para acceder a las candidaturas a cargos de representación por la vía simpatizante hoy son una realidad que se consolida en el municipio de Amealco, Querétaro; donde por primera vez en la historia de esa demarcación, el PRI postulará a un candidato simpatizante, un ciudadano que, sin ser militante del Partido, logró la postulación para la alcaldía, se trata de Rene Mejía Montoya.

Rene Mejía será el candidato del PRI gracias a que los métodos de selección de candidatos permiten una competencia equilibrada entre los militantes y simpatizantes, quienes, en un ejercicio democrático, dan muestra de sus virtudes y permiten determinar cuál es la mejor opción para el PRI en cada postulación.

Hoy, Rene Mejía es el ejemplo ideal, el epítome de las candidaturas simpatizantes, pues resulta electo candidato luego de un proceso interno en el que las garantías constitucionales siempre fueron observadas. Entre enero y febrero, las y los aspirantes a la candidatura por la presidencia municipal de Amealco fueron testigos de la existencia de reglas conforme a las cuales se iba a elegir a la candidata o candidato, reglas que persiguen un propósito particular, cerrar el paso a las imposiciones.

Durante este proceso interno, el derecho de audiencia, mediante el cual se permite a los militantes y simpatizantes conocer el desarrollo del proceso interno fue una realidad que inclusive dio paso a la legítima oportunidad del derecho de defensa, el cual se refiere a que los afiliados puedan asumir una postura sobre el proceso interno, de forma que tenga la posibilidad de ser oído y aportar pruebas.

El proceso de selección por el que Rene Mejía fue elegido candidato a la Presidencia Municipal de Amealco fue un éxito gracias a la existencia de la Comisión Estatal de Procesos Internos (CEPI), un órgano previa y estatutariamente establecido, con atribuciones expresas para conocer los asuntos internos con independencia e imparcialidad, garantizadas por la temporalidad de su ejercicio y sus atribuciones y legitimado en el máximo órgano tomador de decisiones en el Estado, el Consejo Político Estatal.

Hoy, de cara a las elecciones del seis de junio, el PRI tiene un candidato de conducta intachable, que carece de todo vicio grupal o cortesano. Rene Mejía es un candidato que en su protesta como tal afirmo que esta consiente que, en todo el tiempo de duración de su encargo, no tiene la propiedad de ningún puesto y menos del Partido, porque es depositario temporal de una responsabilidad de servicio a la ciudadanía.

Enhorabuena por Rene Mejía, por Amealco, y por el PRI de Querétaro, que, gracias a las candidaturas simpatizantes, hoy se encamina al triunfo electoral el próximo seis de junio en la presidencia municipal de Amealco.

• Victor Alfonso Cuevas Vega
  Presidente encargado del Instituto Reyes Heroles, filial Querétaro.