70 años. ¿Son muchos? ¿Son pocos?

70 años es lo que lleva la mujer pudiendo votar. Hace sólo 70 años se nos reconoció ese derecho. ¿Son muchos? ¿Son pocos?

Son muchos, ¡¡Síí!!, porque, la gestación para el reconocimiento de los derechos de las mujeres inicio en el año 1916, hace 107 años, cuando Hermila Galindo presentó la primera iniciativa de ley al Congreso Constituyente de Querétaro, misma que versaba sobre la participación de las mujeres, para que éstas pudieran emitir su voto, ella sembró la semilla que tardó 37 años en que fuera realidad.

¿Son mucho? ¡¡Síí!!, porque más de 20 mil mujeres se congregaron en el Parque 18 de Marzo en el Distrito Federal (hoy Ciudad de México) para que el entonces candidato del PRI a la Presidencia de la República Adolfo Ruíz Cortines hiciera la promesa de campaña, de respetar y reconocer el derecho a votar de las mujeres, promesa que cumplió; se cumplió hace 70 años y tuvo efectos dos años posteriores a la promulgación de la reforma constitucional.

Siendo así que, el 17 de octubre de 1953, Adolfo Ruíz Cortines, ya siendo presidente de nuestro país, promulgó las reformas constitucionales, y se hizo el reconocimiento legal del derecho a votar.

Fue el 3 de julio de 1955 que las mujeres emitieron su primer voto, eligiendo a nuestros diputados federales de la XLIII Legislatura.

¿Son pocos? Definitivamente son pocos, porque sólo hace 70 años que se nos reconoció como ciudadanas. Reconociendo a las mujeres sus derechos concedidos en la Constitución, reconociendo en texto que las MUJERES tenemos la capacidad de tomar decisiones en beneficio de nuestro país.

¡Que nosotras podamos votar hasta hace apenas 70 años por supuesto que son pocos! Ya que han transcurrido poco más de 100 años para que las mujeres seamos parte fundamental de la política actual.

Durante muchos años, la sociedad, regida y dirigida por los hombres, minimizó a las mujeres, dudando en todo momento de que tuviéramos suficientes ideas, capacidades y que carecíamos de la autonomía suficiente para decidir por quién votar; como quien dice, nos iba a decir nuestro papá, esposo o incluso la iglesia, por quien deberíamos votar; y, peor aún, tampoco consideraban que podíamos participar en la vida política del país.

Actualmente, la apertura política y social nos ha permitido visibilizar las condiciones en las que las mujeres ejercemos nuestros derechos, generando con ello los mecanismos de protección para erradicar la violencia de genero, la violencia política y todo tipo de violencia que atenta contra las mujeres y de la que hemos sido objeto durante muchos años,

¿Son muchos? ¡¡Síí!!, porque, a partir de entonces, las mujeres han ido marcando la diferencia en cada una de las elecciones, hasta llegar hoy en día que somos mayoría en el padrón electoral y que ejercemos la política desde la visión de las políticas públicas, donde se practica la integración y la unificación para lograr las metas, en beneficio de todos, sin distinción de clase, religión, genero.

Actualmente se vive una política semiigualitaria, ya que en el periodo del presidente Enrique Peña Nieto en el año 2014 se aprobaron las reformas para tener el 50% en todas las candidaturas; logrando en la actualidad que los porcentajes de participación sean: 25% de las gubernaturas, 50% en la Legislatura Federal, 54.5% en las Legislaturas Locales y el 25% en las presidencias municipales, siendo visible la desigualdad en algunos cargos de elección popular, por lo que la lucha para la igualdad de nuestros derechos políticos electorales aún no termina.

Nos corresponde a nosotras honrar la memoria de tantas mujeres que lucharon para lograr lo que hoy es una realidad, debemos prepararnos para continuar con el gran legado de quienes nos antecedieron en la lucha por los derechos de igualdad, pero, sobre todo, y con lo que coincido, en que las mujeres organizadas y con objetivos claros lograremos seguir con la transformación y la visualización de los derechos que nos corresponden, porque, insisto, ¡¡tenemos que trabajar UNIDAS!!, hacer equipo, lograr una verdadera igualdad sustantiva y transversal en todos los municipios de México.

Esta elección es de suma importancia para el futuro de nuestro país, nos estamos jugando demasiado, la sobrevivencia de la democracia, de la gobernabilidad; a mí no me gusta el México que estoy viendo; estoy convencida de que la mejor manera de honrar esos 70 años y a todas las mujeres que antes, durante y después de éstos, han luchado para lograr lo que hoy es una realidad; es que las mujeres ya UNIDAS y ORGANIZADAS, no sólo fuimos el pasado, somos el presente y seremos el futuro de México.

Trabajemos UNIDAS, porque estos 70 años no han sido suficientes, porque aún existe una brecha muy grande, para que nuestros derechos no sean cuestionados y mucho menos minimizados, erradiquemos de manera definitiva la violencia política en razón de género.

Hoy, después de poco más de 70 años, tendremos en la boleta presidencial a una mujer digna de confianza y con la convicción de que hará un trabajo que dignifique a las mujeres y que muestre, como ya ha sucedido en otros países, que ¡¡las mujeres saben GOBERNAR y gobiernan BIEN!!

Y que lo que ayer fue conseguir el voto, hoy es lograr la participación política y ciudadana, así que si, ¡son Muchos! Y aquí, lo que hoy es realmente importante, es que si, ¡¡somos MUCHAS!!

Adriana Meza Argaluza
Presidente del ONMPRI Querétaro