Hablemos de la reforma electoral
La reforma electoral que propone el Presidente López Obrador tiene toda la intención de hacer grandes cambios en el sistema electoral de nuestro país. Primero, pasaría de ser INE a Instituto Nacional de Elecciones y Consultas (INEC).
Con el cambio de INE al INEC se vendrían cambios estructurales en su funcionamiento, por ejemplo: desaparecerían todos los órganos electorales estatales para que el INEC concentre todas las votaciones del país. Serían eliminados los órganos electorales locales con ello.
De los 11 consejeros electorales del Instituto, que hay actualmente, pasarían a ser siete. Estos consejeros serían elegidos por el voto popular de la gente.
El punto más delicado aquí es que no cualquiera podría contender para ser consejero electoral, porque estos serían solamente propuestos por los tres poderes: el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial. Observando aquí: el Poder Ejecutivo lo encabeza el Presidente de la República y el Poder Legislativo es integrado por los Senadores y los Diputados Federales, así que al final sería el partido en el poder el que determinaría quién podría competir para ser consejero, perdiendo así la independencia, la imparcialidad y la autonomía de los mismos. Este proceso de selección no sólo sería para los consejeros, también los Magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial (TEPJF).
La Reforma también planea reducir el número de Diputados Federales y Senadores; pasaría la Cámara de Diputados de tener 500 curules a 300; y en el Senado pasarían de ser 128 a 96 representantes. Destacando lo siguiente: no desaparecerían los representantes plurinominales (los que se seleccionan por el número de votos que obtiene cada partido, representación proporcional); de hecho, la propuesta del Ejecutivo Federal es que todos los representantes de las Cámaras se elijan por un sistema de listas, similar al utilizado actualmente para la elección de los plurinominales, por lo que atentaría a la democracia del voto directo en la elección de tus representantes en las Cámaras.
Otro de los puntos que incluye la Reforma Electoral es la reducción de presupuesto a los partidos políticos, su financiamiento ya sólo sería para gastos de campaña, pretendiendo así bajar en un 66% lo asignado a los partidos, lo que pudiera provocar la filtración de recursos de dudosa procedencia para el sostenimiento de éstos.
Una propuesta que, desde mi punto de vista, poco se ha explorado es que con la reducción del presupuesto al INE seguramente se tendrían que cerrar la mayoría de los módulos de atención ciudadana del INE y con ello la posibilidad de renovar, actualizar o emitir por primera vez nuestra credencial de elector, que es una identificación oficial indispensable en la actualidad.
Considero que, como toda, ley puede ser corregible y perfeccionable, sin embargo, la propuesta del Ejecutivo Federal no sólo sería un retraso sino atentaría a la democracia de los mexicanos, pues centralizar las elecciones volveríamos al pasado con decisiones unilaterales del Presidente.
Todos luchamos por nuestra democracia y a todos nos corresponde defenderla. #ElINENoSeToca
Eréndira Trejo Andrade
Publicación de divulgación, correspondiente al cuarto trimestre del ejercicio fiscal 2022.